Esta semana otoñal ha sido perfecta para poder disfrutar del after work nocturno sin tener que estar vestida como esquimal, y aún más, para poder seguir luciendo las piernas (con pantys obvio, nunca tan acalorá) sin morir en el intento.
Estoy tratando de aprovechar al máximo lo que nos queda de otoño para disfrutar de todos los after work que se puedan con mis amigas y tomarnos unas ricas
Lemon Stones acompañadas de sushi. Estoy segura que cuando llegue el invierno todos los panoramas serán indoor y la mayoría comiendo sopaipillas.
El look que propongo para esta deliciosa semana es una falda colorida y llamativa acompañada de un top neutro, unas cómodas botas negras y un bello bolso amarillo (amo este bolso de Asos), obviamente antes de salir de la pega les recomiendo pegarse una manito de gato, porque las 8 frente al compu no pasan en vano.
Para abrigarme me tinca una chaqueta de jeans clarita más informal o un blazer blanco ¿Qué prefieren ustedes?