Los días están raros. Es la normal transición de verano a otoño, de calor a frío, de chala a bota (sin pasar por la chalabota por favor) a la que tenemos que sobrevivir hasta que definitivamente el sol se transforme en un sticker que no calienta a nadie y los ponchos y los calcetines de polar se tomen las calles.
Antes de que esto suceda, tengo un look ideal para estos días ni fu ni fa: los ''joggins'', una maravilla que es como la versión 2.0 de los buzos deportivos adaptados al día a día. Nada más cómodo y estiloso para andar feliz por la ciudad, sobretodo si son con diseño. Yo tengo unos de leopardo (obvio) y ahora quiero agregar a la pequeña colección unos tribales, estampado que como les conté en el post anterior, me tiene enamorada. Un par de joggings combinados con una polera básica o estampada, unas cómodas zapatillas abiertas, accesorios varios y una chaqueta de jeans claro para dar contraste o una chaqueta negra para pasar más piola, es para mi la forma perfecta de sobrevivir al incipiente otoño sin morir en el intento.
Obviamente, si acompañamos este look con un grupo de amigas y unas ricas Lemon Stones heladitas, ni se siente el cambio de estación.
Y ustedes ¿Prefieren veranito caluroso u otoño fresquito?
no tenia idea de que se llamaban joggings... la otra vez estuve a punto de comprarme unos, me tinca que deben ser muy comodos
ResponderEliminarbesos1
El otoño fresqito sin lugar a dudas, pero a diferencia de otros años, el otoño esta bien marcado, me encanto el look, sobre todo las lemon jajkakjakja besitoos!
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